Iban o venían, pero de un solo golpe su destino cambió. Las carreteras son el nuevo campo minado donde más de 600 personas han muerto en un año. Otros viven para contarlo
Iban o venían, pero de un solo golpe su destino cambió. Las carreteras son el nuevo campo minado donde más de 600 personas han muerto en un año. Otros viven para contarlo