El obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, celebró su tercer jueves del Santísimo Sacramento bajo asedio policial y confirmó que cumple 15 días de retención en la Curia Episcopal de esa ciudad, desde el pasado 5 de agosto que el régimen de Daniel Ortega le impuso una condición de “casa por cárcel”.
Monseñor Álvarez le pidió a los feligreses, durante la transmisión de Facebook Live que muestren su apoyo a través de las redes sociales y a través de sus mensajes y oraciones que pueden enviar a un número de teléfono de Whatsapp que compartió en la homilía.
“Les recuerdo el whatsapp (505) 89728516 y que continúen enviándole al Señor sus intenciones, a los distintos Facebook Live, que nosotros los estamos depositando aquí en el altar de la Eucaristía”, manifestó Álvarez.
En el acto religioso, monseñor pidió por el alma de Alfonso Hurtado Chamorro, quien falleció hace dos días.
“Quiero ofrecer esta Santa Misa de una manera particular por un gran amigo que fue llamado el día de antier a la presencia del Señor. Él es Alfonso Hurtado Chamorro, un hombre profundamente mariano, un hombre que amó con toda su mente, con todo su corazón, con todas sus fuerzas, con toda su devoción a la Virgen Santísima, un hombre que realmente experimentó y sintió en su vida la presencia maternal de nuestra Madre, un hombre de profunda tradición católica, un católico convencido de su fe cristiana”, expresó durante la homilía.
Oración por el entendimiento entre los mismos nicaragüenses
Al final de la misa de este jueves, el padre Ramiro Tijerino, quien también está encerrado en la Curia Episcopal, hizo una extensa oración de rodillas, en la que pidió por el entendimiento entre los esposos, entres los hermanos, entre los familiares y entre los mismos nicaragüenses.
“En esas familias donde hace falta ese entendimiento entre los padres y los hijos, entre los mismos hermanos, entre nosotros mismos los nicaragüenses, que a veces nos cuesta sentarnos a platicar con el que piensa distinto, con el que tiene otra manera de pensar, otra ideología, otra religión, ayudanos Espíritu Santo a poder encontrar caminos de entendimiento, caminos de paz, caminos de concordia, para que podamos todos en ese sentido encontrar la unidad”, manifestó el sacerdote.
El pasado 4 de agosto fue el primer jueves que el obispo Rolando Álvarez quiso recorrer las calles de la ciudad de Matagalpa con el Santísimo Sacramento, que es un acto religioso que realiza la Iglesia católica ese día. Sin embargo, la Policía del régimen orteguista le impidió la movilización más allá de la calle de la Curia y también impidió que la feligresía se acercara al obispo.
Al día siguiente, el régimen orteguista ordenó una investigación contra Álvarez, acusándolo de “organizar grupos violentos” y “perturbar la paz”; le impuso una condición casa por cárcel en la Curia Episcopal de Matagalpa. El obispo resiste su encierro junto con cuatro sacerdotes más, dos seminaristas y un camarógrafo.
En sus homilías monseñor Álvarez ha demandado el respeto a los derechos humanos y ha criticado la represión del régimen de Ortega. También, él y los otros sacerdotes, piden por “las personas que están presas injustamente”.
Además de Álvarez, existen tres sacerdotes presos bajo acusaciones de supuestos delitos y han sido sometidos a juicios sin el debido proceso de ley.
Luego de la celebración de la misa, el obispo junto con los sacerdotes y laicos que le acompañan celebraron la Hora Santa frente al Santísimo Sacramento.