El Consejo Supremo Electoral (CSE), institución dominada por magistrados orteguistas, convocó públicamente este martes 16 de agosto las votaciones municipales para este próximo 6 de noviembre, luego de permanecer varios meses en silencio. La convocatoria se hizo oficial a través una certificación (Reg. 2022-02497) publicada en La Gaceta, diario oficial.
La convocatoria descartó la verificación ciudadana que en anteriores procesos se hacía al menos con cuatro meses de anticipación. La verificación es un paso del proceso electoral para que el ciudadano confirme su Centro de Votación más cercano.
“El Consejo Supremo Electoral acuerda primero convocar a elecciones para elegir los cargos de alcaldes, alcaldesas, vicealcaldes, vicealcaldesas; asimismo convocar a elecciones para elegir los cargos de los miembros de los Concejos Municipales propietarios y propietarios con sus respectivos suplentes o respectivas suplentes, por circunscripción municipal en los 153 municipios del país, a verificarse el domingo 6 de noviembre”, establece la convocatoria.
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La primera dama y vicepresidenta designada, Rosario Murillo, confirmó el anuncio de la convocatoria y reveló que el proyecto de Calendario Electoral fue entregado a las organizaciones políticas y próximamente será divulgado por el CSE “en nota”.
El organismo de observación electoral, Urnas Abiertas, tuvo acceso al proyecto de Calendario Electoral, en el que no está establecida la fecha para la Verificación Ciudadana, pero sí se indica que el 7 de septiembre es el cierre del Padrón Electoral.
Para Olga Valle, directora de Urnas Abiertas, “es preocupante que en el Calendario Electoral se omita la Verificación Ciudadana”, y explicó que la verificación “es un procedimiento organizado para perfeccionar y depurar de forma permanente el Padrón Electoral antes de su cierre, correspondiente a ‘setenta días antes de las Elecciones Generales’, según lo establecido en el artículo 37 de la Ley Electoral (Ley 331)”.
Verificación virtual “solo para sandinistas”
Urnas Abiertas señaló que desde el pasado 27 de julio, la estructura partidaria del FSLN convocó a ejercer la verificación para el 13 y 14 de agosto, pero no se llevó a cabo. Por lo que modificaron el llamado, a realizarlo de manera virtual del 18 al 31 de agosto.
El observatorio electoral independiente recordó que “la depuración del Padrón se hace necesaria porque la migración de nicaragüenses ha incrementado tras el fraude electoral de 2021. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos reveló recientemente que entre enero y julio de 2022 han detenido a 96,193 nicaragüenses en sus fronteras”.
A la vez advierten sobre “la manipulación excluyente que de manera sistemática le dan al Padrón Electoral, un ejemplo es lo que ocurrió el año pasado, una estimación técnica sugiere que desaparecieron más de un millón de votantes, cifra que a la fecha el CSE no ha sido capaz de explicar”.
Proceso avanza bajo sus reglas
En el segundo acuerdo el CSE indica que con la presente convocatoria se exhorta a las organizaciones políticas “al debido cumplimiento a la Constitución Política, Ley Electoral, Ley de Regulación de Agentes Extranjeros”, entre otras legislaciones creadas a la medida del régimen orteguista, así como cumplir en relación con la igualdad y equidad de género, a fin de que las organizaciones políticas participantes presenten sus propuestas de estructuras electorales y candidaturas 50 por ciento mujeres y 50 por ciento hombres”.
El órgano electoral informó que queda en sesión permanente hasta la finalización del proceso electoral municipal. Solicitan también a la fiscal general de la República el nombramiento del fiscal electoral.
Asimismo reiteran que “el presente proceso se regulará bajo las disposiciones de la Constitución Política, Ley Electoral, resoluciones, acuerdos y disposiciones que este poder del Estado dictará en lo sucesivo”.
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Las votaciones de este año son para definir alcaldes, vicealcaldes y concejales en los 153 municipios del país, sin embargo, desde que Ortega regresó al poder en 2007, los procesos electorales fueron perdiendo credibilidad por el control que ejerce el partido gobernante en la estructura electoral y por los fraudes electorales que se han cometido para mantener a Ortega en el poder los últimos 15 años.
El partido FSLN que lidera Ortega tiene bajo su control directo 135 alcaldías, de un total de 153, el resto estaba repartido entre diferentes alcaldes liberales.
Sin embargo, a inicios de junio, el régimen Ortega Murillo arrebató las cinco alcaldías liberales pertenecientes al partido opositor Ciudadanos por la Libertad (CxL), que fue cancelado el año pasado por el régimen para evitar su participación en las votaciones presidenciales.