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CONTENIDO EXCLUSIVO.Frente al aislamiento internacional y el repudio del mundo democrático, en el que más de 40 países consideran ilegítimo el nuevo mandato del dictador Daniel Ortega, este ha incrementado su coqueteo y acercamiento político con una de las dictaduras más sanguinarias en el mundo: Corea del Norte, liderada por Kim Jong-Un.
A propósito, entre los pocos países que asistieron el lunes pasado al acto de la autoinvestidura de Ortega, estuvo presente una delegación del régimen norcoreano, así como una delegación de China, país con el que recientemente Ortega restableció relaciones diplomáticas, horas después de romper nexos con Taiwán (el principal donante del país), en señal de reconocimiento a “una sola China”.
La ruptura con Taiwán —según analistas políticos y expertos en derecho internacional—, se da exclusivamente desde la óptica de los intereses estrechos políticos de la dinastía Ortega-Murillo para conservar el poder ilegítimo a cualquier costo.
En esa misma línea, Corea del Norte mantiene relaciones complicadas con Corea del Sur, otro de los principales cooperantes de Nicaragua.
¿Debe Corea del Sur verse en el espejo de Taiwán?
Al respecto, un experto en derecho internacional que pidió el anonimato por temor a represalias de la dictadura de Ortega, que suele encarcelar a los generadores de opinión pública, argumentó que “Corea del Sur ha sido y continúa siendo sumamente solidaria y generosa con el pueblo nicaragüense. Eso se debe en parte a que su capacidad económica, en términos de Producto Interno Bruto, es enorme, 5,500 por ciento superior a la de Corea del Norte”.
Lo de Taiwán —considera—, dejó un mensaje claro a los demás países en materia diplomática. “Los países que mantienen relaciones diplomáticas con Nicaragua deben haber tomado nota de la velocidad con la que cambiaron las lealtades del Gobierno hacia Taiwán”, indicó.
Pero no cree que se repita el mismo fiasco con Corea del Sur, porque Corea del Norte no tiene mucho peso político. “Lo cierto es que Corea del Norte carece de asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, con su consiguiente poder de veto, como lo tiene la República Popular China. De allí que no se contempla repetición del affair Taiwán”, enfatizó.
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Por su parte, un sociólogo que también demandó el anonimato, coincidió por separado con el experto en derecho internacional, en que la de0sesperación de Ortega es tan alta que irá valorando el peso diplomático de cada uno de los países antes de dar un paso como el de Taiwán. “Él valorará la importancia mundial del país en cuestión. Ejemplo de ello, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas es clave”, precisó.
No obstante, a criterio del analista político y exdiputado liberal, Eliseo Núñez, no ve espejo en el tema de Corea del Sur con Taiwán, “porque esos son dos países que se reconocen a sí mismos como dos naciones independientes, en el caso de Taiwán el tema es que China nunca lo ha querido reconocer”.
El analista político y exembajador de Nicaragua, José Dávila Membreño, sostuvo que “Corea del Sur tiene relaciones internacionales no comparables con las de Taiwán, que vive asediado por China continental”.
Además, “Corea del Sur ha consolidado alianzas estratégicas con occidente muy sólidas, que la tienen blindada de cualquier asedio amenazante de Rusia y China. Y económicamente es muy fuerte”.
¿Qué busca Ortega con Corea del Norte?
Pero ¿qué busca Ortega en Corea del Norte? El líder norcoreano Kim Jong-Un es tildado de déspota y sanguinario, que trata a su pueblo de 25.78 millones de habitantes con mano de hierro y que ha convertido a esa nación en una de las más temidas y conflictivas alrededor del mundo, además de empobrecerla.
Mientras en el mundo el régimen norcoreano es repudiado por las violaciones de derechos humanos en su país, la dictadura de Ortega recibió con alegría el saludo y reconocimiento de los resultados electorales de Kim Jong-Un, quien a sus 37 años lidera un cuerpo militar integrado por más de 1.2 millones de efectivos, más de mil misiles y un arsenal nuclear altamente peligroso, según medios internacionales.
El experto en derecho internacional considera que “es bastante probable que el actual mandatario de Nicaragua (Ortega) busque equiparar ante la opinión internacional el aislamiento de Nicaragua con el de Corea del Norte”.
“Son circunstancias muy distintas y no se vislumbra que eso sea factible. La comunidad internacional tiene bastante claro todo lo que concierne a Nicaragua. La narrativa no se puede cambiar desde El Carmen”, agregó.
El exembajador apunta a que Ortega busca “consolidar posición de apéndice del bloque mundial autoritario que encabezan Rusia y China, siente identificación de estilos dictatoriales; el dictador de Corea del Norte ha mantenido a su pueblo reprimido, con hambre en algunos sectores, pero todos rindiendo pleitesía y culto al dictador, que se cree ungido. Los Ortega-Murillo admiran en exceso la dictadura de Corea del Norte”.
Mientras que para el sociólogo “ciertamente Ortega está desesperado por tener amistades internacionales, necesita interlocutores, el desconocimiento, el rechazo para un gobierno es grave, y no puede relacionarse con varios gobiernos y países”.
Desafío para EE. UU.
Dávila Membreño explicó que Ortega, al reanudar relaciones diplomáticas con China, además de su acercamiento con Rusia y Corea del Norte, está lanzando un desafío geopolítico a Estados Unidos.
Por su parte, Núñez opinó que “Ortega se hace amigo de todo el que es enemigo de Estados Unidos, entonces realmente lo que él busca de Corea del Norte es tener un aliado antinorteamericano”.
Cabe recalcar que Rusia y China son miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y fácilmente podrán bloquear cualquier resolución desfavorable al régimen de Ortega.
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Por otro lado, el sociólogo señaló que detrás de las estrategias políticas de Ortega “las Coreas no corren ningún riesgo, más bien a Nicaragua le puede salir muy cara la estrategia de amistad diplomática sin prudencia”.
“Ortega está cometiendo un error político de consecuencias graves y penosas, diplomáticamente hablando”, insistió.
Respecto al tema de derechos humanos, Núñez mencionó que “hasta donde entiendo Corea del Sur aparentemente tiene una diplomacia en que poco le importa el tema de los derechos humanos, principalmente ha sido uno de los aportantes del BCIE (Banco Centroamericano de Integración Económica) junto con Taiwán durante los últimos meses y no ha tenido reparo en cómo se coloca este dinero”.
Nicaragua y Corea del Sur
Nicaragua y Corea del Sur gozan de buenas relaciones diplomáticas desde hace más de 50 años, pero fue hasta en 2007, con el retorno de Ortega al poder, que Seúl estableció en Managua una embajada.
Incluso, la Asamblea Nacional —institución controlada por el régimen orteguista—, declaró el 3 de octubre como “Día de la Amistad Nicaragua-Corea”.
Corea del Sur ha brindado cooperación a Nicaragua en proyectos de agua potable, energía solar, construcción de carreteras y otros sectores.
En cuanto a cooperación, este viernes 14 de enero, los medios oficialistas informaron que Corea del Sur y Nicaragua firmaron nuevos convenios, con el fin de renovar proyectos para el incremento de la productividad de arroz, soya y frijol en el país.
Corea del Norte y Corea del Sur mantienen, desde el conflicto que las enfrentó en 1950 y 1953, una guerra fría de desinformación y propaganda con rumores como los referidos a la extravagante vida de la dinastía Kim, que gobierna con mano de hierro el país.